En el mundo moderno, el método científico tiene unos cauces, una liturgia, llamémosle como queramos, que diferencia la ciencia de la pseudociencia (naturoterapia, homeoterapia, astrología, etc., etc.). Este método, que no voy a explicar aquí porque es bien conocido, ha de acabar siempre de una manera: con una
publicación científica que haya sido objeto de revisión por pares.
Puedes haber realizado el mejor experimento o la más arriesgada demostración que, si no es revisada y aceptada por otros colegas, no se puede considerar ciencia. Le pese a quien le pese. Estos revisores evalúan si tus hipótesis eran correctas, si la metodología era adecuada, si los análisis estadísticos eran apropiados, si tu discusión es coherente, si tus conclusiones son válidas. Si no, cualquiera podría publicar cualquier cosa y llenar el sistema de resultados incorrectos que retrasasen el progreso de la ciencia.
Por lo cual, aunque lo hayas presentado en un congreso, o en la web, o en una revista sin revisión por pares, técnicamente tu trabajo no existe.
Desde luego, el sistema de revisión por pares tiene sus inconvenientes. Todos hemos sufrido alguna revisión injusta por un
referee que llevaba tiempo sin fo... sin dormir bien, que incomprensiblemente contaba con el beneplácito del editor. Y se cuelan por otro lado trabajos de escasa calidad,
duplicados o incluso
falsos.
Pero, en otros casos, un trabajo mío realemente ha mejorado al incluir en la discusión determinados aspectos que un revisor más sabio que yo me ha hecho ver.
Por eso ahora tengo la duda, que tuve anteriormente en otros casos, de si citar o no determinado trabajo de investigación publicado en una revista sin dicha revisión por pares, en este caso la de un Colegio profesional.
Y es que parece que las hipótesis eran correctas, la metodología adecuada, los análisis estadísticos apropiados, la discusión coherente, las conclusiones válidas. Pero, siendo estrictos, ese trabajo no ha sido comunicado a la comunidad científica por los cauces correctos.
Conozco colegas que ese tipo de trabajos directamente ni se plantean citarlos. Yo siempre tengo dudas, y suelo terminar por mencionarlos, quizá por lo mismo que nunca copié en el colegio, por un tonto sentido de honestidad.
¿Y usted, qué opina?